Cepillo dental durante el COVID-19

Qué hacer con mi cepillo dental durante el COVID-19

Utilizamos el cepillo dental para conseguir una buena higiene de nuestros dientes y así conseguir prevenir las enfermedades dentales y mejorar la salud bucal y general.

Dada la situación surgida por el COVID 19 es necesario ser más escrupulosos con las medidas de higiene personal y el cuidado de los utensilios que utilizamos para ella, en este caso el cepillo dental.

Alser-Dental te ayuda explicándote como debes actuar, porque lo más importante es protegerte y también proteger a quienes te rodean, recuerda seguir estos consejos y ser lo más higiénico posible.

Los siguientes consejos ayudarán a evitar contraer o propagar el coronavirus (COVID-19).

Lávate las mano antes de tocar el cepillo

Desde el principio de la epidemia por el coronavirus, todas las autoridades vienen insistiendo en la gran importancia que tiene un correcto y frecuente lavado de manos. Si no tenemos cuidado, los virus presentes en nuestras manos (por haber tocado algo contaminado) pueden penetrar en nuestra mucosa oral, ocular o nasal al tocarnos sin querer.

 Es fundamental, antes de tocar nuestro cepillo de dientes (que va a ir a la boca) lavarnos concienzudamente las manos con agua y jabón. Este lavado debe durar al menos 20 segundos, incluyendo el lavado entre los dedos, los pulgares y las palmas de las manos.

Nunca compartas un cepillo de dientes

No importa si estás relacionado o la cercanía que tengas con las personas con las que vives, nunca debe compartir tu cepillo de dientes con nadie más. Esta es una forma en que los virus y otras enfermedades pueden contagiarse entre personas.

El lavado del cepillo de dientes

Una vez finalizado el cepillado, es necesario proceder a su correcto lavado con agua abundante para retirar los restos de pasta dentífrica y de residuos de alimentos. Es importante no olvidar que el cepillo puede ser una fuente de bacterias, virus y hongos por lo que debemos mantenerlo siempre limpio.

La desinfección del cepillo de dientes

Tenemos que extremar las medidas de limpieza mientras dure la epidemia. Hay que tener en cuenta que un porcentaje importante de la población es portadora del coronavirus sin saberlo. Son los llamados asintomáticos, porque no presentan ningún signo clínico. El coronavirus está presente en la saliva. Por ello, se recomienda desinfectar el cabezal del cepillo después de cada uso. Puede utilizar una solución de povidona iodada diluida al 0.2%. (las personas que sean alérgicas al iodo no deben utilizar este producto desinfectante), una buena alternativa es usar agua oxigenada diluida al 1%. Para la desinfección, sumergir el cabezal del cepillo en la solución y dejarlo 1 minuto.

Secar el cepillo

La humedad en el cepillo favorece el crecimiento de bacterias y de hongos. Por eso, después de usarlo es conveniente secarlo bien. Sujetando el cepillo por el mango, se le va dando vueltas a derecha e izquierda al objeto de expulsar el máximo de agua que haya quedado en el cepillo. Una vez sacudido, el cepillo debe colocarse con el cabezal hacia arriba para que los restos de humedad se escurran hacía el mango y no al revés.

Donde guardar el cepillo dental

No conviene nunca guardar el cepillo al aire, en el cuarto de baño, cerca del lavabo o del sanitario. Las bacterias y virus, cada vez que descargamos el sanitario o nos lavamos las manos, se quedan en el ambiente y pueden depositarse en los cepillos de dientes. Por eso, lo ideal es no tener los cepillos a la vista, sino guardados en un armario. En cualquier caso, siempre deben estar alejados al menos 1 metro del sanitario y del lavabo.

Que no se toquen los cepillos

Un error muy frecuente es guardar varios cepillos en un mismo recipiente o vaso. Eso ocasiona que los cabezales se rocen y se puedan transmitir bacterias, virus y hongos, de un cepillo a otro. Por eso, recomendamos que el almacenamiento se realice a nivel individual, para evitar que se toque un cepillo con otro.

Cambia tu cepillo de dientes regularmente

Es importante cambiar el cepillo de dientes o la cabeza del cepillo, al menos cada tres meses. Quizás incluso antes si las cerdas se desgastan.

Cambiar tu cepillo regularmente también ayudará a prevenir la propagación de bacterias.

Tener el cepillo libre de bacterias y virus ayuda a disminuir el contagio con los cepillos de las personas que están cerca. No olvides que el cepillo lo tienes que cambiar una vez hayas pasado el periodo de contagio, por tu salud y la de los demás.

Alser Dental contigo y a tu lado, para que tú y tu familia tengáis la más sana y bonita de las sonrisas.

Ana Serrano.

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