¿Es el chicle un aliado contra el mal aliento?

Masticar chicle es uno de los recursos más comunes para hacer frente a un problema de halitosis.

Termino de comer, chicle, me huele mal el aliento, chicle.

El chicle es un buen recurso si estamos fuera de casa y no llevamos el cepillo de dientes para poder higienizar la boca, pero “cuidado”, porque en exceso puede incluso empeorar la situación.

Su uso prolongado, puede ser perjudicial porque:

• Engañas a tu estómago, que empieza a fabricar ácidos porque considera que va a recibir comida y al no hacerlo, esos ácidos generan no solo mal olor de boca sino que pueden incluso generar una gastritis por hipersecreción ácida.
• No higienizas bien tu boca, quedando trozos de alimento que se pudren generando mal olor.
• Se puede producir una disfunción mandibular por sobresfuerzo.

Entonces si no es el chicle ¿cuál es la solución al mal aliento?

Antes de buscar como locos un tratamiento en una farmacia o por internet es importante conocer la causa, y el profesional al que acudir es el dentista.

En Alser Dental te ayudamos a encontrar la solución, lo primero es un estudio bucal y así; poder descartar que se trate de algo puntual, o poder tomar las medidas necesarias para eliminarlo.

La mayoría de las veces con tratamientos bucales se suele eliminar el mal olor. Si tras la revisión se diagnostica que el problema no es bucal, los profesionales de odontología te derivan al profesional de digestivo o al urólogo.

Hay veces que coexisten problemas bucales con otros problemas causantes  del mal olor; en estos casos, lo primero es solucionar el problema bucal y si persiste, buscar soluciones farmacológicas o derivar al médico correspondiente.

Los profesionales de Alser Dental te recomiendan solucionar el problema de raíz y no usar métodos que solo consiguen ocultarlo, porque queremos que tú y tu familia tengáis la más sana y bonita de las sonrisas.